
La Organización Mundial de la Salud lamenta el anuncio de que los Estados Unidos de América tienen la intención de retirarse de la Organización. La OMS desempeña una función crucial en la protección de la salud y la seguridad de la población mundial, incluidos los estadounidenses, abordando las causas profundas de las enfermedades, construyendo sistemas de salud más sólidos y detectando y previniendo las emergencias de salud y respondiendo ante ellas, incluidos los brotes de enfermedades, a menudo en lugares peligrosos adonde otros no pueden ir.
Los Estados Unidos de América fueron uno de los miembros fundadores de la OMS en 1948, y desde entonces han participado en la configuración y la gobernanza de la labor de la OMS junto con otros 193 Estados miembros, en particular mediante su participación activa en la Asamblea Mundial de la Salud y el Consejo Ejecutivo.
Durante más de siete décadas, la OMS y los Estados Unidos de América han salvado innumerables vidas y han protegido a los estadounidenses y a todas las personas frente a las amenazas para la salud. Juntos acabamos con la viruela y juntos hemos conseguido que la poliomielitis esté al borde de la erradicación. Las instituciones estadounidenses han contribuido y se han beneficiado de su pertenencia a la OMS.
Con la participación de los Estados Unidos de América y otros Estados miembros, en los últimos 7 años la OMS ha implementado el mayor conjunto de reformas de su historia para transformar nuestra rendición de cuentas, nuestro costo, eficacia y nuestro impacto en los países. Esta labor continúa.
Esperamos que los Estados Unidos de América reconsideren su decisión, y deseamos entablar un diálogo constructivo para mantener la alianza entre los Estados Unidos de América y la OMS en beneficio de la salud y el bienestar de millones de personas de todo el mundo.
La OMS consideraba a Estados Unidos «Una fuerza global en pro de la salud»
Gracias a décadas de sólida colaboración, los Estados Unidos de América desempeñan un papel crucial en el apoyo a la OMS para proteger y mejorar la salud de los estadounidenses y de las personas de todo el mundo.
Estados Unidos es un firme defensor de la seguridad sanitaria mundial. Un ejemplo es la lucha contra la polio, donde el país es un socio clave en los esfuerzos de erradicación dirigidos por la OMS, que protegen a los estadounidenses y a las comunidades de todo el mundo del resurgimiento de esta enfermedad prevenible.
La sólida colaboración entre los Estados Unidos y la OMS en pro de la seguridad sanitaria mundial ayuda a otros países a mejorar su capacidad en áreas clave de seguridad sanitaria. De manera similar, los Estados Unidos han sido fundamentales en la prestación de asistencia humanitaria vital a comunidades devastadas por conflictos, desastres naturales y brotes de enfermedades.
En colaboración con los Estados Unidos, la OMS está impulsando la innovación en materia de vigilancia sanitaria y seguridad de los laboratorios biológicos para hacer frente a las amenazas emergentes. Mediante una mejor vigilancia y preparación de las respuestas, la OMS y los Estados Unidos están trabajando juntos para fortalecer la resiliencia mundial frente a los riesgos para la salud y la seguridad.
Estados Unidos también ha sido un firme defensor de la reforma y transformación de la OMS, promoviendo la eficiencia para garantizar que la OMS esté mejor equipada para abordar los desafíos de salud mundiales. Este compromiso incluye aprovechar los recursos y la experiencia nacionales de los Estados Unidos para fortalecer la creación de capacidad en otros países, ayudando a construir sistemas de salud resilientes capaces de resistir futuras amenazas para la salud.
A nivel mundial, Estados Unidos mantiene una fuerte presencia en los centros colaboradores de la OMS, aportando experiencia en campos como el cáncer, la salud mental, la nutrición y el tratamiento de enfermedades crónicas, lo que refuerza aún más su compromiso con el liderazgo en materia de salud mundial.
Swisslatin / OMS Prensa (22.01.2025)